Al Nassr afronta la temporada 2025/26 con un ambicioso proyecto deportivo, reforzando su plantilla con incorporaciones de gran nivel que consolidan su estatus como uno de los clubes más poderosos de la región. Su fichaje más reciente es el del francés Kingsley Coman, quien llegó desde el Bayern de Múnich por €30 millones y firmó hasta 2028, aportando desequilibrio y velocidad en ataque. A él se suman el defensor español Iñigo Martínez, procedente del FC Barcelona, y el delantero portugués João Félix, cedido desde el Chelsea, refuerzos que elevan aún más la competitividad de un plantel que ya cuenta con figuras de talla mundial como Cristiano Ronaldo, Sadio Mané y Marcelo Brozović. Con estas incorporaciones, el equipo saudí busca dar un salto de calidad tanto a nivel local como internacional, mientras se alista para un exigente desafío inmediato: la semifinal de la Supercopa saudí frente a Al Ittihad el próximo 19 de agosto en Hong Kong, un duelo que servirá como termómetro para medir el potencial de esta renovada plantilla.
Al-Ittihad llega con gran motivación a la semifinal de la Supercopa de Arabia Saudita, donde enfrentará a Al Nassr el próximo 19 de agosto de 2025 en el Hong Kong Stadium, en un choque que promete ser de alto nivel. El conjunto dirigido por Laurent Blanc afronta este compromiso con el respaldo de haber conquistado la Saudi Pro League 2024/25, título que reafirmó su jerarquía en el fútbol saudí. En paralelo, el club se ha movido en el mercado de fichajes y tiene como uno de sus principales objetivos al lateral sudafricano Khuliso Mudau, actualmente en Mamelodi Sundowns, lo que evidencia su intención de seguir fortaleciendo la plantilla. Como parte de la celebración de su 97º aniversario, Al-Ittihad también ha presentado una camiseta conmemorativa que será estrenada en esta Supercopa, un detalle que añade un componente simbólico a un encuentro donde buscarán defender su prestigio y confirmar su condición de campeón vigente.
