Girona inicia la nueva temporada con el objetivo de dejar atrás un 2024-2025 complicado, en el que estuvo demasiado cerca del descenso y sin opciones de clasificar a competiciones europeas. Para revertir esa imagen, el club ha incorporado refuerzos como Thomas Lemar, Axel Witsel y Vitor Reis —estos últimos en calidad de cedidos—, buscando el salto de calidad que le faltó el curso pasado. La pretemporada dejó un balance irregular, alternando derrotas con victorias destacadas, lo que refleja que aún hay ajustes por hacer. El factor local podría ser clave para sus aspiraciones, aunque la pobre campaña anterior en Montilivi obliga a romper cuanto antes esa mala dinámica si quiere aspirar a objetivos más ambiciosos.
Rayo Vallecano afronta la nueva temporada con un impulso anímico importante tras firmar una campaña histórica que le valió la clasificación, por primera vez, a una competición continental: la Conference League, cuya fase previa disputará en pocos días. Su rendimiento en el curso anterior se caracterizó por la regularidad y la capacidad de sumar puntos clave, cerrando el campeonato con una racha positiva que consolidó su pase a Europa. El antecedente reciente contra Girona también es favorable, ya que no perdió en ninguno de sus enfrentamientos, lo que refuerza su confianza. Además, su solidez como visitante y su versatilidad táctica serán armas fundamentales para intentar arruinar el estreno liguero de los catalanes.